domingo, 6 de mayo de 2012

III RUTA DE LAS FORTALEZAS (21/04/2012)


Como ya anuncié en mi anterior crónica, esta vez tocaba en Cartagena. La Armada Española nos tenía preparado un Reto: correr 51 kilómetros en un tiempo máximo de 12 horas pasando por algunas de las  fortificaciones más significativas de la ciudad de Cartagena, entre las que se encuentran castillos, murallas y baterías, muchas de ellas consideradas bienes de interés cultural. Un recorrido con un constante sube y baja, donde se pasa de estar a nivel del mar hasta alcanzar un desnivel acumulado de más de 1500 metros. 
Esperaba con ilusión y con respeto esta carrera porque con ella cruzaba el límite del maratón en montaña. 
Prometía ser una gran carrera y lo fue, si además se le suma la compañía de buenos amigos. Esta es la crónica.

Cerca de las 21h. llegamos al Puerto de Cartagena, Marco y yo para recoger su dorsal.  Quiero darte las gracias Pablo García por ceder tu dorsal. El año que viene te esperamos allí y espero que puedas compartir la ruta con nosotros. Seguidamente fuimos a la estación de trenes para encontrarnos con Juandedios. Él me había recogido el dorsal el día de antes. Gracias Juandedios por tus gestiones.
Como en toda buena carrera que se precie no podía faltar la cena de la pasta. Aparcamos cerca de la meta y a un par de kilómetros de la salida. 
Llegó el gran día, era sábado y tocaba madrugar. Tras el desayuno pre-competición y con el sol ya despuntando nos dirigimos hasta la Plaza de los héroes de Cavite. Cerca del arco de salida nos encontramos con Juan Ramón y su equipo de fontanería Martínez formado por Nino, Fernando, Antonio y Pablo. Esta carrera se puede hacer de forma individual o por equipos de 5. Tras el solemne izado de bandera con el himno de España, se dio el pistoletazo de salida a las 8:00h. Os dejo un vídeo cortesía del señor Bijaaaain donde se hace palpable la emoción y los nervios previos a la carrera: salida plaza héroes de Cavite

Salimos por las calles de Cartagena cerca de 3000 corredores hasta el que sería nuestro primer destino: la ascensión al monte el Calvario por una empinada cuesta de unos 2km entre asfalto y tierra. Aquí me encontré con Juandedios y fuimos un rato juntos. Arriba nos recibía una banda de música junto a la ermita del Calvario. Nos encontramos con el primer puesto de control y avituallamiento de líquido, en el kilómetro 4,7. Después de marcarnos con un sello en el pasaporte, tomamos una senda asfaltada hacia abajo. En el descenso impresionaba la larga serpiente humana que iba detrás comenzando la subida y los helicópteros de la Armada. En este primer tramo Marco se unió al equipo de Jose Ramón conformando el "sexto elemento", jeje. Os dejo otro vídeo de José Ramón de este primer tramo: subida y bajada Monte del Calvario 

El siguiente objetivo era coronar el monte de San Julián a casi 300 m de altitud. Fui trotando en la subida con buenas sensaciones. Aquí nos cruzábamos con los que ya bajaban del Castillo de San Julián. Una vez arriba, en el kilómetro 12 aproximadamente, las vistas eran impresionantes: la bahía de entrada al puerto de Cartagena, el inicio de la carrera, el Monte del Calvario. Al fondo los siguientes puntos a coronar como Galeras, Atalaya y castillo del Roldán. Coronación al Monte de San Julián y bajada

Tras pasar por el segundo puesto de control y ticar el pasaporte emprendí la bajada por una de las partes de la carrera en la que más disfruté. Se trata de un desfiladero que baja del Castillo de San Julián. Zona técnica, escarpada, con zonas de piedra suelta y otras con piedras clavadas en el suelo en forma de pico. Aquí me dejé caer con paso seguro y fui adelantando a mucha gente. Se notan los entrenos por los cortafuegos del llano de la Perdiz y por Sierra Nevada, jejej. El desfiladero desemboca en otra estampa magnífica de la carrera: Cala Cortina, kilómetro 14,7 y tercer punto de avituallamiento con líquido y fruta.  
Tras el rápido descenso llegamos a una zona de llaneo por asfalto que nos devuelve a la ciudad de Cartagena. Aunque llevo las endorfinas disparadas prefiero ser prudente y no apretar en exceso ya que todavía quedan muchas fortalezas por coronar. El siguiente objetivo: Castillo "La Concepción", también conocido por los lugareños como Castillo de los patos
La subida al Castillo de al Concepción es corta pero intensa. Llego trotando a una explanada donde espera el tercer punto de control y avituallamiento con agua, barritas y fruta. Es el kilómetro 20 aproximadamente. Desde aquí se divisa la bahía naval de Cartagena y  los siguientes retos: Castillo de Galeras y Castillo de las Atalayas. Descendemos hasta salir a las principales calles de Cartagena donde hay gente animando, rumbo al siguiente punto estratégico: batería de Fajardo en el kilómetro 25,5 de carrera. 

En este punto hago un pequeño descanso para comer en el avituallamiento sandwich, donut y fruta. Este es el avituallamiento más completo de toda la carrera. Hasta ahora todo va marchando bien. Desde aquí se ve a lo lejos el Monte de Galeras con su castillo. Coronamos el Castillo de Galeras sexto punto de control y avituallamiento. Pasamos por  dentro de la muralla del castillo que está abierta con motivo de la carrera ya que es zona militar. Salimos del castillo amenizado con musica estilo "pachún-pachún" que levanta el ánimo en el kilómetro 30 de la carrera. 

Bajamos por asfalto siguiendo el mismo camino por el que se subió en dirección a uno de los huesos duros de la prueba: la subida al Monte de las Atalayas. Por una vereda vertiginosa comienzo el ascenso hasta el Castillo de las Atalayas sin prisa pero sin pausa, paso a paso. Tras pasar por el punto de control y avituallamiento bordeamos el castillo y volvemos a bajar por donde subimos antes. Es el kilómetro 40 y una vez más tengo fuerzas reservadas para disfrutar de la incomparable sensación de dejarme caer monte abajo. Tras la vereda continúa una fuerte pendiente hacia abajo de asfalto (ésta si se me llega a atragantar) y comienzo a notar una pequeña molestia en el empeine de los pies. Ya se va haciendo patente la carga de kilómetros. 

Ya sólo quedan los dos puntos más complicados de la carrera: el mirador del Roldán y la batería del Roldán, emplazada en la cima del monte Roldán a 495 m. Por una pista de tierra inicio el ascenso hasta el mirador del Roldán, trotando en las zonas de menor inclinación pero reservando en todo momento. Una vez allí me encuentro con lo más duro, la parte que desde el comienzo sabía que tenía que afrontar con suficientes fuerzas. Un militar de la Armada indicaba el ascenso vertiginoso hacia lo alto del castillo del Roldán. Los excesos cometidos durante la carrera se ven reflejados claramente en este tramo. Al poco de empezar la ascensión ya había gente parada al borde de la vereda sufriendo calambres, fatiga y bajadas de tensión siendo atendidas por los enfermeros. Pasito a pasito y controlando la respiración voy ganando altura. Las vistas del mar son impresionantes. Una vez arriba me pone el sello en el que será el último punto de control antes de la meta. Pero todavía queda lo peor o lo mejor, según las fuerzas que conserves. Gracias a los vídeos del Gran José Ramón(Castillo del Roldán) , sabía que después de esta subida en el kilómetro 45 aproximadamente, seguía una bajada salvaje por una senda de vértigo en zig-zag, bastante técnica y escarpada. A esta dificultad había que sumarle la carga muscular que ya en el kilómetro 45 llevaba en las piernas. En toda la carrera iba pensando en esa bajada, reservándome y lo conseguí. Fueron cerca de 3km en los que sentí poco a poco que cuerpo y mente iban conectados, en perfecta unión con la naturaleza, sientes que entras en estado de flujo, sientes una paz y felicidad absoluta. Una vez abajo volví a tomar la pista del parque de Tentegorra donde me crucé con mucha gente que iban camino para tomar la subida a la batería del Roldán. La emoción por llegar hizo que acelerara, el gemelo izquierdo comenzaba a mostrar signos de fatiga, por lo que tuve que aflojar el ritmo de carrera. A lo lejos vi a una chica que en una subida me adelanto, iba muy fuerte. Le eché el lazo, jejeje y en los últimos kilómetros la alcancé. Ya estaba en el acuertelamiento, apurando mis últimas fuerzas apreté para no ser alcanzada y lo logré. Llegué a meta con el esprincito como diría mi buen amigo Nando, parando el crono en 6h 16m 6s. Allí ya estaba Marco esperándome para felicitarme. 

Las clasificaciones quedaban así: 4ª en mi categoría senior femenina a 5 minutos de la tercera. 4º en su categoría senior masculino para Marco. Ganadores por equipos a Fontanería Martínez en 4h 51m ¡Enhorabuena chicos!
Destacar en esta carrera el esfuerzo, compañerismo y la unión de este equipazo, así como la ayuda desinteresada que mostró Marco por ellos. Sin apenas conocerlos les acompañó, les ofreció su ayuda y apoyo. Os dejo algunas fotos bellísimas que reflejan mejor que las palabras lo que quiero transmitir y el video emotivo de entrada del gran equipo : 




Entrada a meta pletórica
Tras el esfuerzo llegó la recompensa

Aquí junto a mi buen amigo Juandedios, gracias por haberme ilusionado desde hace un año para que fuera a esta carrera. Repetiré sin duda. Espero verte pronto en alguna carrera por tierras granadinas. 
Que decir de este equipazo formado por personas que apenas se conocían y consiguieron estar a una, superando el sufrimiento y dando muestras de compañerismo, espíritu montañero al 100%  
Una suerte encontrarme en el camino con gente como vosotros. 
Gracias una vez más por compartir tus vídeos, me han ayudado mucho para afrontar esta carrera. Un placer conocerte. Espero que volvamos a coincidir en otra carrera, ya sabes que en Granada tienes una amiga. 

Hasta ahora mi planificación va por buen camino. La idea de ir realizando carreras de menos kilómetros a más está resultando. Mi último objetivo (por ahora) serán los 101km de Ronda.